Si bien muchas personas creen que los colores de los cristales para anteojos de sol son un aspecto meramente estético, la realidad es que cada una de las tonalidades tiene un propósito y una función particulares.
Ahora bien, ¿qué colores de cristales de lentes de sol existen en el mercado y cuáles son los recomendados para cada uno de los diferentes defectos visuales? ¿Qué rol cumple la intensidad del color? ¿Qué son los filtros terapéuticos?
En este artículo, respondemos todos estos interrogantes.
La coloración es una ayuda óptica adicional, ubicada en la matriz del lente por proceso de absorción, que de manera selectiva reduce la transmisión del espectro visible al ojo.
Teniendo en cuenta la intensidad del color, las gafas de protección solar se clasifican en 5 categorías de acuerdo al porcentaje de absorción de la luz:
Un profesional de la salud visual debe tener en cuenta estas categorías para realizar una prescripción adecuada frente a la protección solar, de acuerdo a las necesidades del paciente.
La tonalidad y porcentaje de oscurecimiento dependen del material en que se prescriba el lente y su aplicación se puede realizar de manera uniforme (color total) o hacia la parte superior del lente (degradados).
Transmite todo el espectro visible, se recomienda para todos los defectos refractivos y ambientes soleados. Proporcionan una visión cercana muy natural y aportan gran comodidad ocular en periodos prolongados de uso. Se recomiendan para conducir.
Mejoran el contraste de los colores. Se recomienda para miopes, ambientes con nieve o lluvia y espacios con diferencias marcadas luz-sombra.
Ideales para condiciones con luz tenue o actividades a realizar en la noche. Mejora el contraste. Reduce la fatiga ocular.
Son ideales para condiciones de luz media, se aconsejan para pacientes hipermétropes. Mantienen un buen equilibrio entre los colores, mejorando ligeramente su contraste. Se recomiendan para personas que realicen deportes náuticos.
Se recomienda para personas que trabajan en radiología, para obtener un mejor contraste en el análisis de las placas diagnósticas.
Absorbe longitudes de onda amarillas, atenúa algunos destellos, su efecto es mejorar contrastes. Tiene un uso cosmético.
Reducen el resplandor generado por lámparas fluorescentes y halógenas, su uso se recomienda en ambientes interiores.
Al recomendar un filtro coloreado se deben tener en cuenta aspectos como los niveles de iluminación en donde se usarán los lentes, el tipo de defecto refractivo, el trabajo que se realizará con los lentes y si hay o no presente una patología ocular (para este último caso se recomiendan filtros terapéuticos).
Los filtros oftálmicos de absorción bloquean de forma preferente las radiaciones de determinadas longitudes de onda, dejando pasar las restantes.
En determinadas alteraciones o patologías retinianas como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE), la retinopatía diabética, la retinosis pigmentaria, el albinismo o las cataratas, se hace necesaria la protección visual de las radiaciones luminosas de una forma selectiva.
Esto lo conseguimos gracias a los filtros de absorción que proporcionan una protección adecuada para cada patología, ya que para cada una de estas se necesita un filtro con una concreta absorción de las radiaciones del espectro.
Se recomienda para personas afectadas por estas patologías y alteraciones:
Además de la protección ocular, la mejora visual es notable, ya que controla la cantidad de luz que entra en el ojo, por ello se experimenta un mayor confort y mejora del contraste de la imagen. En especial, los pacientes de baja visión se ven beneficiados porque la información que llega a la retina lo hace de forma más clara y cómoda.
¿Conocías la función de los colores de los cristales para anteojos de sol? Si tenés dudas o necesitás hacerte el par que te prescribió el oftalmólogo, contactanos.